Le toco el brazo y la venta está hecha

Hablar de ventas con según qué vendedor proporciona muchas perlas.

Una de las que más me gusta: “Le toco el brazo y la venta está hecha”.

Seguramente existan estudios que demuestran que, todo siendo comparable, tocar el brazo en nuestra cultura latina incrementa la efectividad del cierre de venta. No estaría sin embargo tan seguro de que esto funcione con los japoneses…

Pero, de existir, estos estudios no los conozco o aún no los he encontrado.

Lo que sin embargo percibo es que si la estrategia para cerrar ventas de un vendedor se resume en tocar el brazo del cliente potencial, mal vamos.

Espero que haya algo más, digo yo.

De hecho, en un assessment de vendedores muy puntero, la parte relacional es uno de los 21 criterios que contribuyen al éxito comercial. Uno solo de veintiuno...

¿Mi sugerencia para ese vendedor?

Si lo consideras oportuno, sigue tocándole al brazo al cliente, pero asegúrate haber hecho los demás deberes antes.

Ps: a nivel anecdótico y sin validez estadística, en función de quien me llegue a tocar el brazo, puede generarme más rechazo que ganas de comprar…